No es extraño que en una ciudad como Medellín, moderna e innovadora, se suspenda el servicio de agua potable bien por mantenimiento o problemas en las redes de abastecimiento. Lo que sí es inaceptable es que un hotel como éste, Hotel Casa Mayor, o cualquier otro, carezca de tanque o depósito de almacenamiento de agua. Tuve la grata fortuna de ir a Medellín; pero la mala suerte de hospedarme una noche en este hotel que durante cerca de dos días no dispuso del preciado líquido… ¿Qué pensar si cuando un tanque de agua de 2000 litros de capacidad, de uso residencial, cuesta en Colombia cerca de US$300, el cual bien podría ser adquirido con la tarifa hotelera equivalente a 8 huéspedes? Se me ocurre que el hotel no se corresponde con la ciudad; y sus propietarios, con la afabilidad de los de Medellín.